El control ginecológico o chequéo ginecológicoes una de las consultas médicas que toda mujer debe tener como prioridad para cuidar de su salud sexual y reproductiva. Un ginecólogo se encarga de buscar signos y síntomas específicos que pueden sugerir enfermedades, al mismo tiempo, hará todo lo posible para tratarlas y revertirlas.
Pero gran parte de la responsabilidad recae en manos de las mujeres, quienes deberían planificar una consulta ginecológica, al menos, una vez por año y hacerse un examen preventivo anual . En este post, te dejaremos toda información relevante sobre este tema. Cómo agendar tu consulta, cuándo comenzar a ir y qué procedimientos serán experimentados en esta visita.
Te aseguramos que tu salud estará en las manos de un experto y te sentirás increíble.
¿Qué es el control ginecológico?
Fundamental para la salud femenina, el control ginecológico no es más que una consulta médica enfocada en el área genital de las mujeres. Incluye entonces el examen físico, donde se visualizan dichos órganos y pueden hacerse tactos delicados para buscar masas o tumoraciones.
¿Cuáles son los estudios ginecológicos anuales?
Adicionalmente, se incluyen procedimientos diagnósticos como la citología, también conocida como Papanicolaou; un procedimiento mínimamente invasivo donde se toma una muestra de las células que recubren el cuello uterino.
Se le suma la colposcopia, que no es más que la visualización de la mucosa vaginal con un colposcopio; equipo parecido a un microscopio, pero de dimensiones un poco mayores y que disminuye las molestias en el transcurso del procedimiento.
Las ecografías, pélvica y transvaginal, no se realizan comúnmente, a menos que la paciente lo solicite o el médico lo considere necesario. Dichos estudios de imagen permiten detectar afecciones del útero, los ovarios o las trompas de Falopio.
Estudiar el ciclo menstrual de la paciente y conocer sus hábitos sexuales y de higiene permitirán que el médico le ayude a cuidar sus genitales. Una consulta realmente importante para cualquier mujer.
Es importante empezar a incluir el examen mamario en los controles ginecológicos cómo rutinarios. Es recomendable hacerse una ecografía mamaria y una mamografía entre los 35 y los 40 años, y luego incluirlas periodicamente en los controles.
¿Quiénes deben asistir a dicho control ginecológico?
Debe quedar claro que el control ginecológico no tiene una edad de inicio específica, lo ideal, será que la primera visita sea en la adolescencia. Esto permite que las jóvenes aclaran muchas de sus dudas en torno a los cambios hormonales y físicos, los cuales el ginecólogo puede ayudarle a comprender.
Por eso a la pregunta ¿Cuándo hay que hacer los controles Ginecologicos?
Entre los 13 años y los 15 sería aconsejable realizar esa primera consulta.
Para las mujeres en edad reproductiva, comprendida, entre la primera menstruación y la última, antes de la menopausia; las consultas deben planificarse por lo menos una vez al año. Por otra parte, una mujer que toma anticonceptivos, deberá ir a control una vez cada seis meses. Esto permitirá que el médico trate los efectos positivos y negativos de dichos medicamentos.
Cabe destacar que, las mujeres embarazadas, aunque asisten a control obstétrico, el médico ha de practicar algunas de las actividades ginecológicas antes mencionadas.
¿Cuáles son los objetivos de esta consulta médica?
Todas las mujeres deben estar enteradas de los beneficios que puede traer a su vida, asistir al control ginecológico. Al mismo tiempo, les ayuda a comprender la importancia que esta visita médica tiene para su salud. Conócelas a continuación.
Prevención de enfermedades
Un ginecólogo tiene como principal objetivo cuidar de la salud sexual y reproductiva de su paciente. Por ende, el diagnóstico y prevención de las enfermedades de transmisión sexual se convierte en algo esencial. Varias de las técnicas mencionadas son útiles para este fin.
La colposcopia se encarga de identificar lesiones en las células del cuello uterino, útil para diagnosticar el VPH y el cáncer de cuello uterino. Aunado a esto, la colposcopia complementa el diagnóstico, haciéndolo más fiable y orientando el tratamiento.
Algo semejante ocurre con las infecciones vaginales, que deben ser tratadas para evitar las complicaciones adicionales. Un buen control mantendrá a la paciente satisfecha con su vida sexual y el estado de sus genitales.
Tratamiento oportuno
El inicio de la vida sexual y el desconocimiento, pueden predisponer a las mujeres a padecer de patologías que deben ser tratadas con premura. Consultas periódicas y el tratamiento eficaz, pueden revertir los efectos de enfermedades como el VPH o la candidiasis.
Planificación familiar
Finalizamos mencionando la planificación familiar, una de las características del control ginecológico que mejora la natalidad y previene las enfermedades asociadas al embarazo no planificado. Este ítem incluye la indicación de anticonceptivos y el control preconcepcional, que ayuda a lograr embarazos satisfactorios y sin complicaciones.